La propuesta circula por las calles y se ubica en las plazas, apropiándose de ellas temporal y colectivamente. Al estilo de las derivas situacionistas, se generan las condiciones necesarias para fomentar la libre comunicación y la manifestación pública. De manera estática se ubica en las plazas emblemáticas de los distintos barrios y en fechas señaladas peregrina por las calles para una reunión de barrios en un espacio a escala metropolitana.

Tres fases. Tres escalas. Tres maneras de libre discurso.

Fase 1. Como hito estático, que ocupa el barrio. A esta escala se practica el discurso “en el que todo el mudo puede hablar y ser escuchado. Este es el lugar en el que el cambio en el barrio puede ocurrir. Se darán actividades de ocio y la toma de decisiones.

Fase 2. En fechas señaladas se produce la peregrinación en las calles de Nueva York. El mensaje debería ir deprisa. Es momento para que la manifestación pública se apropie del lugar, de los ciudadanos. 

Fase 3. Tras la peregrinación, la parada: Las reuniones a escala metropolitana. Esta escala sólo permite el discurso unidireccional, la construcción de símbolos comunes toma el espacio. Se produce públicamente el intercambio entre los barrios y todos los tipos de eventos masivos.